COVID-19, el virus que ha puesto en jaque al mundo, ni los aviones de combate, ni los porta aviones, ni los sub marinos nucleares, ni los tanques de combate, ni los misiles, sirven para luchar la batalla más grande de la humanidad de los últimos años. Hoy vemos con mucha tristeza cómo nuestros esfuerzos de años de trabajo, inversiones y sacrificios han sido bruscamente detenidos, y lo peor, sin tener una fecha final, no sabemos hasta cuándo. Sin embargo, este terrible momento en dónde estamos a manos de Dios, debemos aprovecharlo para saber que hemos hecho…con nuestra familia, nuestros amigos, nuestros colegas, con nuestro planeta. Debemos recapacitar en como estamos llevando este mundo, que es el único que tenemos. La verdad no creo que me quiera ir a vivir a Marte ni nada parecido, en este caso prefiero ser conformista con lo que tenemos, un planeta que nos da de todo, ríos, mares, naturaleza, veranos, inviernos, sol, luna y estrellas y sobre todo, alimentos. De esta misma manera invitar a todos a aprovechar esta segunda, tercera o cuarta oportunidad, pues algunos no la tuvieron y quienes quedemos aquí debemos hacer un cambio importante para el mundo, y solo será posible si lo hacemos juntos.